Tú que harías?
"Un día un ateo caminaba por un camino, resbaló y cayó por un precipicio.Al caer se aferró a una rama y pensó: solo Dios puede salvarme ahora.Pero yo nunca creí en él¿Que puedo hacer? y exclamo:
¡Por favor Dios, nunca creí en ti, pero si me salvas, creeré en ti para siempre!No hubo respuesta, por lo que repitió su suplica.
De pronto una gran voz trono desde las nubes:Oh! no tu nunca creerás. Conozco a las personas como tu!¡Por favor, Dios! ¡Estas equivocado! ¡De verdad voy a creer en ti!¡Oh no, no lo harás! ¡Es lo que todos dicen!Tanto imploro y argumento el hombre, que finalmente Dios dijo:
Esta bien, creeré en lo que dices y te salvare... Suelta la rama
¿Soltar la rama?, exclamo el hombre. ¿Crees que estoy loco?"
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Para decir "¿Soltar la rama? ¿Crees que estoy loco?", no hace falta ser ateo. Precisamente una de las tentaciones más fuertes de creer en Dios es la de utilizarlo como "rama" a la que agarrarse.
Yo conocía el cuento, aunque era un poco diferente, no contenía reproches, y no se le achacaba a un ateo, sino a un hombre en general, y me parece mucho más interesante para que reflexione un creyente acerca de qué está haciendo con su fe que para cuestionar la supuesta "fe" de un ateo frente a las dificultades que nos superan.
Si no creyeras saber qué va a ocurrirte si te "confías a Dios", si "salvarte" pudiera llevar consigo "aniquilarte", ¿soltarías la rama?
¿Estaría un hombre loco si se soltara sin tener creencias a las que "agarrarse" mientras cae? Y en el caso de seguir agarrado a sus creencias, ¿verdaderamente se está "soltando de la rama"?
"Había una vez un hombre que cayó por un precipicio y quedó colgando, agarrado de la rama de un árbol, sin posibilidades de salir por sí mismo. Entonces, empezó a gritar una y otra vez, pidiendo ayuda:
- ¡¡¡Eeeeehhh!!! ¡¡¡¿Hay alguien ahííííí....?!!!
Pero era un camino muy poco transitado, y ya estaba perdiendo por completo la esperanza de ser rescatado, cuando de pronto, escuchó una voz que le dijo:
- Hijo mío, soy Dios. Suéltate de la rama y te salvaré.
A estas palabras, siguió un silencio denso que fue interrumpido tímidamente por la voz de nuestro hombre:
- ¿Hay alguien más...?"
Pues para encontrar a Dios, habrá también que soltar a Dios, y arriesgar la esperanza, y entregar la vida.
A lo mejor, para eso hay que estar loco, y es más fácil simplemente optar por "tener creencias", o también "optar por no tenerlas".
Que tengas mucha suerte en tu camino.
Un abrazo.
Dudar del relato.
Los que no somos creyentes, a la hora de los peligros o de las dificultades, nunca pedimos ayuda a Dios!
Estamos acostumbrados a resolver los problemas por mérito propio. Con éxito o fracaso, se verá, pero con valentÃa y sentido común.
Soy agnóstica.
De verdad, ¿vos la hubieses soltado?, yo ni mamado, a la larga tanto a creyentes y ateos los buenos o malos sucesos los alcanzarán y solo de cada uno depende sentarse a esperar ayuda celestial o tratar de solucionarlo, me quedo con la segunda opción, o acaso la expectativa de vida de los creyentes es mayor que la de los ateos?
por eso antes de decir soy ateo hay que autoexaminase por que muchos solo lo son por la hipocrecia religiosa que han encontrado. por que muy en su interior saben que existe un DIOS que todo lo puede lo que pase es que se sienten defraudados.
saludos.
No la suelto.
Jesús,que nos enseño a conocer a Dios, siempre pedÃa la colaboración del otro para hacer sus milagros,y esto ere creer en ël y en quién lo envió.
La Fe es un regalo,que debe cuidarse y acrecentarse.
Aunque no sea persona de fe, la vida misma me enseña que muchas veces hay que arriesgarse,nunca todo es tan matematico.
Yo que vos intento,seguro que te va a ir bien. ale
ESTO es por lo que Mitte es de mis favoritas. Me deja con la boca abierta.
Los que no son creyentes buscan a Dios solo cuando se ven en apuros pero se olvidan de el cuando estan bien
otro lindo cuento
Me suelto sin pensar dos veces... el final es... AL OTRO DIA LO ENCONTRARON MUERTO A VEINTE CENTIMETROS DEL PISO...